.The_True_Tittle.

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~*Rose´s iPod*~

7 de diciembre de 2010

Capítulo 13.

-Llego tarde, llego tarde… ¡Llego tarde!

Aparté un montón de ropa del armario hacia un lado para ver su interior. ¿Dónde estaban los vaqueros gastados cuando se necesitaban? Al final opté por unos oscuros que había sobre la silla, los del día anterior. Me puse la camiseta sobre ellos y la chaqueta de cuero negra. No tuve tiempo de meter las cosas en la mochila, por lo que cogí un bolígrafo y lo metí en mi bolsillo a la vez que agarraba la carpeta en la mano. Le rasqué la cabeza a Boo, que estaba sentado sobre el escritorio, admirando mi falta de tiempo con sus enormes ojos verdes. Dejé la puerta entornada y salí pitando.

La clase de Lectura Intensiva (sí, es tan patética como suena.), no tenía apenas sentido. Había que sentarse hora y media, con un libro que repartía el profesor y hacer un mini examen tipo test para comprender la lectura. Una clase de relleno, básicamente.

Y además, daba la casualidad de que esta clase, no era en la academia. Era en la biblioteca, una enorme sala tras el edificio principal. Mucho más lejos.

Salí al exterior prácticamente corriendo y el frío me azotó los ojos. Fruncí el ceño, teniendo en cuenta también el Sol que siempre reinaba en el cielo. Estúpido inventor del clima meteorológico.

Entré por la puerta principal corriendo y me choqué con alguien. Era un chico, porque en vez de caerse él, su cuerpo me propulsó hacia atrás. Caí de espaldas al suelo.

-Dios, mi espalda…- Me quedé sentada en el suelo, mientras cerraba los ojos del dolor.

- Lo siento, me habría apartado de saber que venías corriendo.- Me ofreció la mano. La tomé y me levanté. Al instante me di cuenta de que no tenía la libreta.

- Y mi…- Comencé a mirar por el suelo. Luego la vi, tras la puerta. Iba a cogerla cuando alguien la tomó entre sus manos y las estiró para que yo las cogiera. La cogí y era… ¿el mismo chico? Enarqué una ceja y me giré a donde antes, y efectivamente, ahí estaba el otro. Me volví a girar, y así tres o cuatro veces hasta cerciorarme de que no era un espejismo.- ¿Sois gemelos no?

-Dean.

-Yo Colin.- Éste se colocó al lado de su hermano y pude comprobar que eran idénticos.

-Yo soy Rose.- ¡Anda! ¿Desde cuando era yo tan sociable? Estaba descubriendo una faceta oculta de mí.

-Lo sabemos.- Dijo Dean. ¿O era Colin?

- La nueva.- Definitivamente, ese era Dean.

-¿Rose?- Heath apareció por una esquina. Llevaba unos vaqueros negros y una chaqueta de forro gris oscura. Tenía todo el pelo en una cresta despeinada.

-Heath, menos mal.

- ¿Dónde estabas? Anabel y Eva te han estado esperando durante media hora en el comedor. No has desayunado y encima llegas tarde.- Me estaba riñendo delante de la gente. Menuda vergüenza.

-No puse el despertador, y me he levantado tarde. Lo siento.

Se pasó una mano por la frente. Realmente parecía preocupado. Me cogió del brazo y me arrastró por el pasillo. Me giré para despedirme de los gemelos con un gesto de mano, mientras luchaba por no caerme.

-¡Eh! ¿A qué viene tanta prisa?- Al fin paramos.

-Hoy ha habido una pelea.- Me susurró. Nadie a nuestro alrededor parecía estar pendiente de nosotros.- Unos Éxodos novatos entraron en el campus en la madrugada. Acosaron a unas Delphos de primer curso que estaba en la fiesta de la fraternidad hermana. El novio de una de las chicas les atacó con sus poderes. Hemos estado a esto- hizo un gesto con las manos- de armar una buena.

-Ya, pero…¿Qué pinto yo en todo esto?-Alcé las cejas.

-Pues que si llega a pasar, tú apenas hubieras estado preparada.

- Hubiera muerto.- Me encogí de hombros.- Nada nuevo, teniendo en cuenta la cantidad de estupideces que me están enseñando ahora…

Lukas apareció en ese momento, arrastrando a un chico menudo de pelo largo del cuello de la sudadera.

-Escúchame bien, inútil.- Lo estampó contra la pared mientras todos lo mirábamos callados.- Si vuelves a entrar en este recinto sin un permiso, te juro que te congelaré tanto el cerebro que tendrás que darte calor con un secador durante el resto de tus días. ¿Me has entendido?

El chico le miró asustado y se retorció mientras Lukas lo dejaba en el suelo. Salió corriendo como alma que lleva el diablo. Lukas se giró y me saludó con la mano. Se apoyó con una mano en el hombro de Heath y le dijo algo al oído que no entendí. Se miraron lentamente a los ojos y se acercó a mí.

-Vamos.- Me cogió del brazo y comenzó a tirar de mí como había hecho Heath antes.

-!Hey!- Me quejé.- ¿Qué demonios os pasa a todos hoy? ¿Teneís complejo de cuerda en tensión?- Lukas me miró raro, pero no dejamos de caminar.- No, es que como todo el mundo me tira del brazo, ya me estoy empezando a plantear la opción de la amputación...

-Verás, como supongo que ya te habrás dado cuenta, si voy a pegarte ahora mismo...- Le interrumpí.

-Cosa que por tu bien, no deberías hacer, si no te quieres ganar una patada en...- Ahora me interrumpió él.

-Calla y escucha.- Estábamos atravesando el campus de atrás de la academia. Entramos en ésta y salimos al campus principal.- Como te habrá dicho Heath, estamos teniendo problemas con los novatos de las escuela Dexter.- Abrí la boca para hablar, pero olvidé que no podía interrumpirlo. Aún así, el me calló y al parecer, me leyó la mente porque contestó a mi pregunta imaginaria.- Exacto, nosotros tenemos una escuela para aprender a defendernos, y los éxodos tienen una escuela para aprender a atacarnos.

-Qué educativo, oye.- murmuré con ironía.

Dejamos de caminar y me soltó el brazo. Estábamos en medio del césped. Se podía considerar un auténtico campo de fútbol multiplicado por 5, aproximadamente.

-Deja la chaqueta y el bolígrafo junto al árbol y acércate. Vamos a empezar a practicar en serio.

Me adelanté a él y le di la espalda mientras caminaba hacia el árbol. Me quité la chaqueta de cuero negro y me quedé en manga corta. Hacía frío, pero...Demonios, soy una Delphos Pirotécnica, ¿cómo quedaría mi estatus si me quejaba? Dejé el bolígrafo en un bolsillo de la chaqueta. Y antes de que me diera la vuelta, oí un ruido sordo.

-Lukas, ¿qué estás planeando? Apenas llevo 3 semanas y...- me giré.

Un tío de dos metros de altura, robusto como un armario, aproximadamente de nuestra edad (aunque aparentara como 5 años más), con unas Ray-Bans de espejo le acababa de asestar un puñetazo en la cara a Lukas.

-¿Me has oído CUBITERA? - Se agachó hacia el suelo, donde estaba Lukas, con los ojos
cerrados y aparentemente inconsciente.- Si vuelves a tocar a mi hermano te prometo que te saco los ojos. ¿Te enteras?- Me acerqué a paso ligero y le empujé. Apenas conseguí moverlo, tan solo que se tambaleara un poco, lejos del alcance de Lukas, pero esa era la intención. - ¿Qué te piensas que estás haciendo, GÓTICA DE MIERDA?

-Repítelo.- Me puse delante de Lukas, mientras que el armario empotrado se acercaba.- Repítemelo si tienes agallas.- Sonreí, aunque estaba confiada en que me iba a matar.- Acércate y repítemelo, a la cara. Venga.

Hinchó los orificios de la nariz. A su espalda estaba el crío al que Lukas había advertido, y a cada momento, más gente que se iba acumulando atenta a la pelea. Se acercó hasta a mí y cuando estuvo a menos de un paso, me sopló en la frente. Esa fue la gota que colmó el vaso.

-¿Sabes...cuanto...tiempo...he...tardado...en...alisarme...el...FLEQUILLO?- Noté como se tensaba. ¿Estaba asustado?- ¿Qué pasa? ¿Tienes miedo de una GÓTICA DE MIERDA?- imité su tono de voz.

Y ahí fue cuando me miré reflejada en sus Ray-Bans. Yo, que me había preocupado por mi flequillo. Todo mi pelo estaba volando, flotando en el aire, no sin añadir que era como si estuviera perfilado en llamas. A esto hay que incluir que mis ojos ya no eran verdes, sino que eran rojos y negros. Probablemente mi cabeza era una enorme bola de fuego. Ahora tenía muy claro que este tipo me tenía miedo. Me concentré en mi mano, pero tan solo conseguí incendiar mi dedo índice. Bueno, con eso bastaría.

-Mira.- Me acerqué a él. Casi podía oler su aliento y escuchar su rápida respiración.- Realmente, puedo metértelo por la nariz. ¿Quieres probar?

Escuché las risas de algunos Delphos. Esto le provocó aún más. Sacó de su cinturón una especie de daga tallada, y debido a la cercanía de nuestros cuerpos, deduje que me iba a matar.

-Joven, ni se te ocurra sacar ninguna de tus sucias armas cerca de un Delphos.- Helena, la madre de Lukas, apareció tras el chico. Llevaba un vestido corto negro, sobre el cual llevaba puesta una gran túnica verde oscura. Me gustaba esa túnica. Le quitó la daga al armario empotrado sin que éste pudiera remediarlo dado que la velocidad de una Delphos veterana era un 6.1% superior a la de un guepardo. Sí, aunque no lo parezca, atiendo en clase.- Rose, haz el favor de llevarte a Lukas a la enfermería, que lo vea la Sra. Tays. Yo me ocuparé de este éxodo.- Asentí con la cabeza y me giré a ver a Lukas.

Creo que me sentí aún peor que él. Estaba tumbado boca arriba, con una mano en el ojo izquierdo. ¿Por qué los tíos siempre apuntan al ojo izquierdo? Si alquien me pegara en el izquierdo lo mataría. Después de lo que tuve que pasar para hacerme el tatuaje de la estrella...

-Eh, Lukas.- Abrió el otro ojo.- Vamos, tenemos que ir a la enfermería.- Hay que ponerte algo ahí.- Le toqué la mano helada, y se la quité del ojo para vérselo mejor.- Puff... Esto tiene muy mala pinta. Creo que se está hinchando.

-Oh, gracias por el diagnóstico, creo que eso me ayuda.- Su tono de voz me hizo reír. Le cogí del brazo y le ayudé a levantarse.

Le cogí del forro de la chaqueta y caminamos todo el rato yo delante de él. Cuando llegamos a la enfermería, la Sra. Tays lo tumbó en una camilla y para mi asombro, le colocó un chuletón en el ojo. Cuando ésta salió por la puerta, no pude más que reírme.

-¿Qué te hace tanta gracia? No podré volver a abrir el ojo hasta dentro de dos o tres días...- Hizo un gesto de dolor. Cogí una silla y me senté a su lado.

-Qué pena. No podré disfrutar de el precioso color de tus ojos durante 48 horas... Tranquilo, creo que lo soportaré.- Giró la cabeza a malas penas y soltó una breve carcajada.- ¿Te duele mucho?

-No.

-Va, no te hagas el duro, sé que te duele.-Arrugué la nariz. Tenía que ser realmente molesto que te pusieran un bistec en la cara.

-¿Para qué preguntas, entonces?- Dobló una pierna.- Creo que no va a hacer falta que te de clases de lucha. Sabes defenderte bien tú solita.

-¿En serio?- Me hinché de felicidad.

-NO.- Me desinflé de golpe. Enarqué una ceja y rió.- Te has colocado demasiado cerca de él, lo que quiere decir que si mi madre no hubiera aparecido, lo más probable es que estuvieras muerta.

-Y tú con un ojo morado y quién sabe qué más.- me levanté de la silla y la dejé en su sitio.- Si no hubieras estado mirando a las nubes...

-Si no te hubiera estado mirando, querrás decir.- Me miró con el único ojo libre y creo que comencé a sentirme como un pollo en el asadero.

Afortunadamente, no me salvó la campana, sino la señora Tays, que apareció con una jeringuilla cargada hasta los topes.

-Buena suerte, Lukas.- Le susurré. Puso cara de pánico. Me reí.- Señora Tays, creo que está delirando. No tenga piedad y póngale una buena dosis de lo que sea que es eso. No creo que lo note.

Miré a Lukas. Éste me miró y salí de la enfermería despidiéndome con la mano. Me dio un escalofrío y me puse la chaqueta de cuero. Aunque en realidad, por dentro era todo un núcleo de fuego condensado, deseando salir.

7 comentarios:

Klaudia Quiroga dijo...

Buahhh cómo mola este capítuloo!! xD Me ha encantado, diosss Rose está hecha toda una antorcha ahahahah y sus comentarios son tan irónicos que te mueres de risa xD
En serio, ya me muero de ganas por leer el siguiente.
Por cierto, me quedé con la duda por el comentario que dejaste en mi chat, te leíste sólo el último capítulo o lo leíste todo?? Es que como he renovado el blog entero... pensé que a lo mejor no te habías dado cuenta, de todas formas, aunque si no es el caso no importa, he puesto un recuadro de información justo debajo del menú del blog, por si quieres pasarte y leerlo. xD

Klaudia Quiroga dijo...

Hey Clau, ahora que tengo cuadro de afiliación por qué no me afilias a tu blog??? XD si no quieres no pasa nada, es sólo que me gustaría xD
No hace falta que publiques este comentario, sólo quería decírtelo a ti y como no sabía cómo poder contactar contigo pues te lo dejo así como eres tú la que decide que comentarios se publican y cuales no... pues pensé que sería la mejor forma xD

v dijo...

Por fin un nuevo capitulo y es Rose la que tiene que defender a Lukas jajajaja Muy buebo, sigue pronto porfa :)

Anónimo dijo...

me encaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaantaaaa!
te lo habia dicho??
publica la continuacion pronto ehh

http://madnesslive.blogspot.com/

este es el link d mi blog x si t kieres pasar y tahh

en serio, ME ENCANTA


muaac*

El Secreto León dijo...

Me encantaa!! como siempre te superas a cada capitulo! me encanta como escribes !! =)

Nube dijo...

Hola!!
Me ha encantado el capitulo... ya estoy deseando el siguiente!!!
Un beso.

Andrea dijo...

Este ha sido el mejor de los mejores. Adoro los comentarios irónicos de Rose. Espero con muchas ganas el siguiente. Un beso muy grande =)